Como ya sabes, la moda es cíclica y lo que hace unos años estaba de moda hoy no lo está y al revés. Siguiendo esa premisa no es de extrañar que hoy en día veamos muchas tendencias de años pasados teniendo un gran éxito. Los jerséis con cremallera vuelven a estar de moda, algo que estuvo muy en auge en la segunda mitad del 2000. Después de las últimas pasarelas celebradas hace escasas fechas no cabe duda que esta prenda vuelve a estar de moda y que nos acompañará no solo en invierno sino también en la próxima primavera.

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La moda de los jerséis con cremallera

Muchas de las grandes firmas apuestan por este formato como por ejemplo Chloé, Versace o Lacoste entre muchas otras. Entre sus muchas creaciones podemos encontrar modelos más ajustados y otros un poco más anchos, pero todos con un denominador común, una cremallera que va desde la parte alta del pecho hasta el cuello del jersey.

Además de las formas, colores y estampados, también nos encontramos con los tejidos. La lana es eminentemente para esta temporada de invierno en la que nos encontramos, dejando el punto fino para la temporada de primavera, cuando comienzan a mejorar las temperaturas.

Ha gustado tanto esta tendencia que cada vez son más celebrities las que visten esta prenda. Además hay que decir que dan mucho juego porque se pueden combinar con muchas otras prendas diferentes, desde faldas largas o midi hasta pantalones, bien sean de vestir, vaqueros de corte recto o los de corte slim o incluso leggins. ¿Se puede  pedir más a una prenda?

Además, también se pueden utilizar con una chaqueta, bajo una sudadera o una sobrecamisa, aportando un toque bastante urbano a este estilismo.

También hay que destacar que su versatilidad es tal que esta prenda puede ser usada incluso con trajes sastre dando una pincelada muy casual y actual en todo momento.

Tú decides, o colores lisos para combinar de una forma mucho más fácil con cualquier otra prenda, elegir alguna de las muchas tendencias en estampados que hay o incluso probar con una de las últimas propuestas, los degradados en dos o tres colores para dar un toque informal a nuestro estilismo.

Como ves, es una prenda estupenda que permite infinidad de combinaciones diferentes, hay un gran número de modelos para todos los gustos y no es una prenda que se pueda decir que es cara.